Piedrazos hasta la muerte por puta.

En Iran, las autoridades condenaron a una mujer -es la sexta desde 2002- a morir lapidada, por cometer adulterio.

Este método, según amnistía internacional, es considerado un mecanismo de tortura, porque se escogen piedras tan grandes como para causar dolor, pero no para matar a la víctima enseguida.

Aunque esta forma de muerte esta abolida en todo el mundo, en Iran insisten con este mecanismo, porque según el código del islam, es un crimen.

Antes de sentenciarla a morir apedreada, la joven había recibido 99 latigazos como una advertencia, de que si seguía incurriendo en estos actos, la iban a cagar a piedrazos hasta matarla.