
Dos chicos de 15 y 16 años, ingresaron a robar la vivienda de una familia que estaba de vacaciones. Tras romper un ventiluz, los jóvenes, ingresaron a la vivienda, y, como el suministro eléctrico estaba cortado, decidieron incendiar papeles para generar luz. Aparentemente, un cubrecamas y un colchón se incendiaron, generando una gran cantidad de humo que obligó a los chicos a escaparse, pero no pudieron salir y murieron asfixiados.
3 comentarios:
Pobres pibes. La solución es educar!.
Pobres pibes. La solución es educar!.
... Que boludos.
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